Negligencia médica

 

Cuando se trata de nuestra salud, los médicos son las personas en las que más confiamos, pero desafortunadamente, también pueden cometer errores, lo que puede tener graves consecuencias.

Si ha sido víctima de una negligencia médica o de un error médico y quiere reclamar, le presentamos algunos casos más habituales en la práctica judicial. La vida de una persona puede quedar marcada o incluso puede ocurrir la muerte cuando fallan los protocolos sobre métodos y prácticas médicas.

 

¡CONTACTANOS!

A. Causas de negligencia medica

Enumeramos las causas más habituales de negligencia médica, reconocidas por los tribunales y que generan la obligación de indemnizar serían:

1. La incompetencia del profesional

Se considera cuando el médico tiene una formación deficiente, no tiene los conocimientos o habilidades suficientes para interpretar los signos y síntomas que tiene el paciente. Por tanto, no puede realizar ninguna intervención diagnóstica o terapéutica en este caso.

2. Imprudencia del profesional de la salud

Es la situación en la que el médico estima que no pueden ocurrir complicaciones graves, las complicaciones que ocurren, de hecho, pueden considerarse como tales; y como resultado, el médico no tomará medidas para prevenir estas posibles consecuencias.

3. Error en la intervención quirúrgica

Se puede considerar, cuando se produzcan daños o lesiones del operado, durante el acto quirúrgico, como consecuencia de una mala praxis médica – del médico o del equipo de intervención. Ha habido innumerables casos de lesiones o daños en los nervios, olvido de instrumentos médicos en la operación o cortes incorrectos, etc.

4. Error de diagnóstico

Se considera la situación en la que no se utilizaron todos los medios posibles para establecer el diagnóstico. O, cuando, tras varias visitas al médico, por el mismo problema de salud, se retrasa o se niega realizarse las pruebas necesarias para establecer el diagnóstico, lo que puede tener consecuencias negativas a largo plazo, pueden dificultar la recuperación o incluso provocar algún daño grave.

En este caso, estamos en la situación de pérdida de oportunidad, porque aparte de la demora en establecer un diagnóstico, ya no es posible aplicar un tratamiento que hubiera ayudado a la cura, si se hubiera aplicado en el momento adecuado.

5. Prescripción inadecuada de medicamentos

Se puede considerar cuando el médico prescribe los medicamentos incorrectos o el modo de administración indicado es incorrecto. Dependiendo de su salud y de la medicación inapropiada recetada, puede o no causar efectos adversos en el cuerpo. Hay situaciones en las que los medicamentos administrados incorrectamente por los pacientes pueden empeorar la salud o retrasar la recuperación del paciente.

6. Falta de consentimiento informado

En caso de un tratamiento o una intervención médica, el profesional de la salud está obligado informar al paciente, sobre los riesgos existentes. Normalmente firmamos un contenido con información sobre la intervención o tratamiento que vamos a aplicar.

No obstante, si no ha sido debidamente informado y sufre daños que no sabía que podía sufrir, se considera negligencia médica y puede reclamar como tal, aunque es difícil demostrar que no ha sido informado de todos los riesgos existentes. La mayoría de las veces, el paciente lee (o no lee) el documento que recibe para información y firma, antes de la intervención médica, pero no siempre comprende todos los términos y las condiciones que aparecen en dicho documento y la mayoría de las veces, se ofrece la firma, sin que el paciente sea plenamente consciente de lo que ha firmado.

7. Error en la cirugía estética

Una de las áreas más comunes en la negligencia médica. En parte se debe a que algunas de estas clínicas de estética trabajan con personal no calificado, realizando intervenciones sin la formación adecuada. Así, tras las intervenciones se produce un empeoramiento de la apariencia del paciente, daños estéticos o incluso lesiones derivadas de la intervención.

8. Infecciones hospitalarias

Son aquellas infecciones con las que el paciente está contaminado dentro del hospital. Tales situaciones pueden ocurrir si no se utilizan artículos sanitarios debidamente esterilizados y, por lo tanto, se transmite una infección o enfermedad a través de estos. Sin embargo, no todas las infecciones o enfermedades que se obtienen en el hospital son del campo de la negligencia médica. Por ejemplo, cuando está hospitalizado y coge un resfriado debido al aire acondicionado, por un sistema inmunológico personal débil, este no es un caso de negligencia médica y no se puede reclamar ninguna compensación.

 

9. Transmisión de enfermedades infecciosas como resultado de una transfusión de sangre

Se considera cuando se realiza una transfusión de sangre y se transmite de esta manera, una enfermedad infecciosa del donante de sangre.

10. Las lesiones perinatales y las sufridas por la madre al nacer

Se consideran lesiones, tanto las sufridas por la madre al nacer como las sufridas por el recién nacido, producidas durante el parto. Una de las lesiones reconocidas y sancionadas es que no se verifique si el tamaño del niño que va a nacer pasaría por la pelvis de la madre. Si la madre sufre lesiones pélvicas al nacer, este caso se considera negligencia médica.

En todos estos casos, se puede solicitar una indemnización ante los tribunales. Los casos presentados se encuentran entre los más comunes, pero la lista no es exhaustiva, puede continuar y se pueden considerar otras situaciones que no fueron enumeradas anteriormente.

B. ¿Cómo y cuándo reclamar la indemnización?

El procedimiento para seguir es sencillo, aunque los juicios pueden retrasarse y la mayoría de las veces llega incluso al Tribunal Supremo.

Se debe comenzar por reunir todos los documentos que puedan servir como punto de partida en un proceso, como evidencia de los hechos que causaron el daño: historial médico, resultados de pruebas del diagnóstico, recetas, etc. Este material se puede utilizar para contactar a un perito médico, para una valoración estricta de la situación, para determinar las lesiones sufridas y evaluar las indicaciones de las cuales resulta que el profesional médico no actuó correctamente. Existe una lista de peritos médicos, que es remitida a los jueces por el Colegio Oficial de Médicos de cada provincia.

 En esta etapa, se establece a qué persona física (personal médico) o persona jurídica (institución médica) se le asigna la responsabilidad; puede ser el médico o el hospital, por ej.: en caso de infecciones recibidas en el hospital. También la responsabilidad se puede atribuir al centro de salud o al fabricante de un producto sanitario. Son absolutamente necesarios los informes médicos, para proceder a la medición de las secuelas producidas. Al historial clínico se puede acceder por petición ante los Servicios de Atención al Paciente que existen en todos los centros sanitarios. La obligación de conservación del historial médico alcanza un mínimo de cinco años desde el alta, según el art. 17.1 de la Ley 41/2002

Dependiendo de la unidad en la que recibió atención médica, existen dos formas diferentes de reclamar daños y perjuicios:

1. Si ha ocurrido negligencia en el campo de la Salud Pública

Hospitales públicos, centros de salud, clínicas ambulatorias. El trámite comienza con la presentación de una reclamacion de responsabilidad administrativa, ante el Ministerio de la Salud. En caso de no ser aceptada la reclamación, deberán iniciar un procedimiento judicial contencioso-administrativo, para reclamar una indemnización por los daños ocasionados. El plazo es de un año y comienza a correr desde la estabilización de la lesión o si el resultado fue fatal, desde la fecha del fallecimiento.

2. Si se ha producido negligencia en el ámbito de la Salud Privada

Hospitales, clínicas y centros médicos privados, dentistas, centros de cirugía estética, cirujanos plásticos – deberán presentar una denuncia de responsabilidad civil ante los tribunales de la jurisdicción civil. El plazo es de 5 años en el caso de responsabilidad contractual y de 1 año en el caso de responsabilidad extracontractual. Y en este caso, los plazos se contabilizan de la misma forma que en el caso anterior.

Tanto en el ámbito de la salud pública como en el ámbito de la salud privada, existe la posibilidad de presentar una denuncia en los tribunales de la jurisdicción penal, pero en la mayoría de los casos esta no es la forma más adecuada.

Todos los centros sanitarios de España cuentan con un Servicio de Atención al Cliente donde se pueden reclamar problemas que no son del ámbito de la negligencia médica. Se pueden presentar quejas por cuestiones administrativas, relacionadas con determinados trámites como citas retrasadas, etc. o situaciones en las que ha sido víctima de un comportamiento grosero e inapropiado por parte del personal del hospital.